jueves, 3 de julio de 2014

¿Quieres un consejo?

‘’Dame un consejo.
Háblame de tus heridas y de como evitarlas;
y por primera vez en la vida
ponte en mi lugar y analiza la situación, 
que la falta de empatía es la causa de todos los males.’’

Y aunque aconsejar, en principio, no suena peligroso,
destapa siempre los mayores errores 
en un intento de rescatar una lección 
de entre un puñado de recuerdos ácidos.

No creo que seamos capaces de aconsejar 
sobre aquello que no hemos vivido;
en ese caso opinamos y tratamos de ser objetivos
pero la barrera de la experiencia es inmensa.

‘’¿Quieres un consejo?’’ 
Y afirmaba.

Te diré que deseches todas las frases hechas
y que no te sientas mal si crees ser la única persona en el mundo 
que no comparte aquello de 
‘’si no es feliz conmigo, que lo sea con otra’’.

Y que puede ser que ‘’la vida compartida sea más’’
pero que hay ojos que no quieres compartir
y manos que quieres poseer con el secreto y la soledad 
de una sola piel.

Puedo decirte también que ‘’Siempre’’ 
a veces no contesta al teléfono
y que cambia a menudo de dirección;
que aunque el tiempo suele ser un buen aliado
no tiene la responsabilidad de salvarte el culo de todos los fregados.

Que cuando sientas que mueres en vida 
y creas que no vas a recuperarte
recuerdes que puedes morir cien veces por mes;
que si los gatos tienen siete vidas
sumes y sigas
que aún te quedan noventa y tres para llegar al límite; 
es más, que si el límite tiene unos ojos bonitos
puede incluso que sumes alguna más.

Pero no te olvides de que eres humano
y cuanto más te alejes de esa línea que dijiste no cruzar
más tendrás después que recorrer para llegar al punto de partida.
(Si es que vuelves a encontrarlo).

Que no te asustes por los cambios
porque serás diferente cada vez que unas manos sepan llegarte al corazón.

El tabaco será malo ahora 
y en unos cuantos siglos, 
pero si necesitas unas caladas, adelante, 
porque no hay nada como ser dueña de tus vicios 
y protagonizar todas tus dosis letales.

Que a veces ser la ‘’nada’’ de alguien 
es mucho más eficaz que ser su ‘’todo’’; 
en especial cuando ‘’todo’’ está repleto de ‘’nadas’’ 
y empiezas a enemistarte con significados 
tan faltos de verdad como de sentido.

También podría decirte que corras de los trenes
y que es mucho mejor que no esperes 
a nadie en el andén, 
solo por si no llega, 
y te ves con un equipaje ‘’rumbo a ninguna parte’’; 
y en el remoto caso de que subas
busques un vagón con litera
donde tus esperanzas puedan echar una cabezadita
porque si un día despiertas 
y se te han dormido hasta el punto de no sentirlas,
el tren se queda sin combustible 
y tienes que bajarte entre historias a medio acabar .

Que puedes cambiar de esperanzas
pero siempre tienes que llevar algunas encima.

Van a mirarte muchos ojos
como si fueses el centro de escenas teatrales 
de esta obra que es la vida.

Se te colarán versos en la retina 
que van a decirte quien eres 
cuando hayas perdido el norte 
y no sepas donde está la brújula que un día 
marcaba el sur de unas piernas tan largas como perfectas.

Que no te confundas, que una no nace fuerte; 
que son las decepciones, las despedidas, 
las noches a la deriva, 
las que te hacen hielo
y Siberia empieza a resultarte un lugar caluroso 
en comparación con el frío que suele hacerte encima.

Y en tal caso te aconsejo 
que busques el calor de una poesía, 
no necesitas que esté hecha letras, 
te bastará con una boca que te relate historias 
de tesoros perdidos entre piratas con el corazón de palo; 
va a bastarte con una persona que te haga de faro
y te resulte luz cuando todo sea una habitación cerrada sin interruptor.

Que hagas de tus aciertos, arte
y te los cuelgues por las paredes para poder acudir a ellos 
cuando los fracasos y los tropiezos vayan a tu cama 
a montarse una de sus juergas. 

Que marques Madrid como la ciudad 
donde el amor se hace droga
y revolcón, whisky y tentación; 
que todo quede entre los muelles de un viejo colchón. 
Y hagas de París, tierra de salvación.

Y sobre todo
que vivas con los ojos bien abiertos
que no se te escape Bukowski, ni Neruda, ni Benedetti
ni siquiera Cortázar;
que si te los encuentras y le das cobijo 
en cada una de las etapas de tu vida, 
nunca estarás del todo solo; 
y que sueñes
que sueñes con su pelo enredándose en las cientos de cosas 
que creías inertes 
y que revivieron con un leve movimiento de caderas 
al ritmo de cualquier cantante de carretera.

‘’¿Quieres algún consejo más?’’ 
Y volvió a afirmar.

Que cojas todo cuanto he dicho 
y lo olvides;
que he bebido demasiado 
y que en la segunda línea dejé de saber lo que decía.
Se apoderaron de mi los recuerdos 
y hablaron a través de mis labios. 

Que no tengas en cuenta todo 
lo que te he contado, 
porque si hay algo único en la vida, 
son los errores. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario